La defendió Ander Burgaña Agoües, médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria del CABO Sant Cugat
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MútuaTerrassa acoge la lectura de una tesis doctoral sobre la patogenia y los tratamientos antiparasitarios en la infección intestinal

El edificio docente de MútuaTerrassa acogió el acto de defensa de la tesis doctoral “Estudio de la patogenia y de los tratamientos antiparasitarios en la infección intestinal por Dientamoeba fragilis”, desarrollada por Ander Burgaña Agoües, médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria del CABO Sant Cugat.
El Dr. Tomàs Maria Pérez Porcuna, jefe de los Servicios de Vigilancia Epidemiológica y Respuesta a Emergencias de Salud Pública de la Región Metropolitana Barcelona Sur (Agencia de Salud Pública de Cataluña) se encargó de dirigirla junto con la Dra. Rosa Mari Abellana Sangra, profesora titular de Cimientos Clínicos de la Universitat de Barcelona. La misma Dra. Abellana fue su tutora.
El tribunal estuvo formado por el Dr. Julià González Martín, microbiólogo del Hospital Clínico y profesor agregado de la Universidad de Barcelona (presidente); la Dra. Laura Gavaldà Mestre, jefa del Servicio de Prevención y Control de la Tuberculosis y Programas Específicos de la Agencia de Salud Pública (vocal) y la Dra. Yamile Zabana Abdo, jefa clínica del servicio del Aparato Digestivo del Hospital Universitario MútuaTerrassa (HUMT) y coordinadora de la Unidad de Enfermedades Inlamatorias Intestinales (secretaria).
El trabajo en cuestión, el cual recibió una calificación de excelente, tiene como objetivo analizar la relación entre la carga parasitaria de Dientamoeba fragilis y la sintomatología gastrointestinal así como evaluar la eficacia de los principales tratamientos antiparasitarios para establecer criterios de manejo clínico.
Como conclusión, la tesis corrobora que existe una asociación significativa entre la carga parasitaria elevada y la sintomatología clínica. También establece que la paromomicina (PMM) -antibiótico de amplio espectro- es más eficaz que el metronidazol (MTZ) -antimicrobiano empleado para tratar las infecciones bacterianas y protozoaries- para erradicar el parásito, a pesar de que algunos casos pueden resolverse espontáneamente. Finalmente, el trabajo destaca la necesidad de poder disponer de un algoritmo diagnóstico y terapéutico claro para guiar el manejo clínico de esta infección prevalente.